
El Secretario General destacó que “el problema no es que no se hable español, sino que no se piensa en español”, subrayando que el lenguaje claro y accesible es necesario para el funcionamiento de la democracia, para la vida en sociedad y para la inclusión.
Indicó, asimismo que, “El lenguaje puede agredir o unir, puede descalificar o valorar, puede antagonizar o converger, en fin puede respetar o menospreciar. Lo que no puede ser es opaco, ambiguo, confuso, ambivalente, hermético, ofensivo, empalagosamente oportunista. Tiene que ser siempre claro y accesible ya que solo así hermana, acerca y forja un eslabón invisible entre las personas.”
La Convención contó con al presencia de los Directores y representantes de las Academias de la Lengua Española de los países iberoamericanos (ASALE) y destacados expertos de la academia, el periodismo, las letras y la sociedad civil y permitió abordar los desafíos actuales del lenguaje claro y accesible desde distintas perspectivas así como avanzar en el fortalecimiento de la Red integrada actualmente por más de 500 instituciones de toda Iberoamérica.