El Secretario General Iberoamericano, Enrique V. Iglesias, inauguró, junto al canciller uruguayo Reinaldo Gargano, en Montevideo (Uruguay) el primer Centro de Información de la SEGIB.
En la ceremonia de apertura del nuevo Centro, que tuvo lugar el pasado 12 de diciembre, Iglesias señaló que la SEGIB tiene planeado abrir varias "antenas" en América Latina "para estar más cerca de la gente y respaldar los diferentes proyectos de cooperación y desarrollo".
Junto al Centro de Montevideo, que también dará cobertura a Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, la Secretaria General Iberoamericana tiene proyectado abrir otro centro en Panamá el próximo mes de febrero, al que le seguirán nuevas inauguraciones en Brasilia y en Lima.
“Es esta la primera presencia de la SEGIB en América Latina, algo que creo necesario por muchos motivos, pero sobre todo porque es importante llevar la labor de la Secretaría más cerca de los países, más cerca de las instituciones, de los organismos internacionales, de los medios de comunicación y de la gente”, afirmó el Secretario General Iberoamericano.
También destacó que el nuevo Centro “contará con un excelente director, como es Norberto Iannelli, quien fue subsecretario de Relaciones Exteriores de la República Argentina, y estoy seguro que con su experiencia en esta región, con su experiencia en organismos internacionales y de integración –especialmente los que tienen su sede en Montevideo- estoy seguro que va a ser un vínculo estupendo con esta realidad a la que queremos servir”.
En el acto participaron, además, el vicepresidente uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, los ministros uruguayos de Economía y Finanzas, Danilo Astori, y Salud Pública, María Julia Muñoz, así como el ex presidente Jorge Batlle, embajadores de los países iberoamericanos; representantes de organismos internacionales, dirigentes de Cámaras empresariales y representantes de los medios de comunicación uruguayos e internacionales.
Un espacio iberoamericano
Por su parte, el canciller Gargano destacó la importancia de la apertura de esta primera oficina regional de la SEGIB, en el proceso de crear un espacio iberoamericano integrado por 650 millones de personas que hablan español y portugués, que debe incidir en lo económico y en lo político en el mundo.
Gargano subrayó que se trata de un espacio de unidad en la diversidad, “porque somos distintos, pero tenemos una cosa en común que es la lengua, instrumento formidable para que la gente se entienda y complemente sus pensamientos”.
Este espacio apunta, destacó, a obtener cosas “como un mejor bienestar para nuestra gente, mejores condiciones de comercio, el ejercicio de los Derechos Humanos, la defensa de las libertades públicas y el respeto al Derecho Internacional”.
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