El día de ayer se llevó a cabo en Asunción, Paraguay, la asamblea plenaria de la XVIII Cumbre Judicial Iberoamericana, un foro de diálogo y concertación institucional de carácter internacional que opera en los 22 países que pertenecen a la Comunidad Iberoamericana de Naciones, y también el Estado Libre y Asociado de Puerto Rico.

En esta ocasión la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, participó en la inauguración destacando el papel que juega la cooperación entre poderes judiciales en la región iberoamericana y el enorme activo de resultados concretos que se han producido al respecto en la región.

Destacó además que esa cooperación tiene más de 26 años de rica y vasta tradición, plasmados a través de Cumbres Judiciales y encuentros entre ministros de Justicia, jueces, fiscales generales, Cortes Supremas y otros órganos y operadores judiciales.

En la plenaria participaron también la titular de la Comisión Permanente de Género y Acceso a la Justicia de la Cumbre Judicial Iberoamericana y presidenta de la Corte Suprema de Justicia de Costa Rica, Zarela Villanueva, y la representante regional de ONU Mujeres, Luiza Carvalho, quienes junto a la Secretaria General Iberoamericana firmaron un convenio entre los tres organismos para apoyar a las instancias judiciales a introducir la perspectiva de género en la administración de Justicia y unificar criterios para mejorar el acceso de las mujeres a la justicia.

«Esta alianza será clave para seguir apoyando a los poderes judiciales en la incorporación de la perspectiva de género, incluyendo a través del mejoramiento de la calidad de sus estadísticas con el objetivo de contribuir a la definición de acciones para mejorar el acceso a la justicia a las mujeres» indicó la secretaria general, Rebeca Grynspan.