Discapacidad/
El Informe Mundial de la Discapacidad 2011 (realizado por la OMS y el Banco Mundial) estima que alrededor de un 15% de la población tiene algún nivel de discapacidad.
Las constituciones de todos los países iberoamericanos consagran el derecho al trabajo y a la protección social. La mayor parte de ellas contiene referencias explícitas a los derechos de las personas con discapacidad, sobre todo a la inclusión social y laboral.
Desde hace varias décadas se habla de la inclusión social de las personas con discapacidad como una aspiración de equidad y como un derecho de todo ser humano a ser reconocido como miembro natural de la sociedad de la que forma parte.
Como apunta el Instituto Interamericano del Niño, las personas con discapacidad siguen teniendo menos oportunidades de acceso a determinados bienes sociales como la atención de salud, la educación y el trabajo. Además, señala algunos especialmente necesarios según su tipo de discapacidad: eliminación de barreras arquitectónicas, impresiones en sistema braille y trasmisiones en lengua de señas, entre otras.
Debemos trabajar en el desarrollo de habilidades sociales, de autonomía personal, de autorregulación y de autodeterminación de las personas con capacidades diversas.